Por: Stephen R. Covey

– ‘Mi esposa y yo ya no compartimos los sentimientos que solíamos tener. Creo que ya no la amo y que ella no me ama a mí. ¿Qué puedo hacer?’
– ‘¿El sentimiento ya no está?’, pregunté.
– ‘Eso es así’, afirmó. ‘Y tenemos tres hijos que nos preocupan. ¿Qué usted sugiere?’
– ‘Ámala’, le contesté.
– ‘Como le dije, el sentimiento ya no está’.
– ‘Ámala’.
– ‘Usted no entiende. El sentimiento de amor ya no está’.
– ‘Entonces ámala. Si el sentimiento ya no está, es una buena razón para amarla’.
– ‘¿Pero cómo amarla si ya no la amas?’
– ‘Mi amigo, el amor es un verbo. El amor –el sentimiento– es el fruto del amor, el verbo. Así que ámala. Sírvele. Sacrifícate. Escúchala. Empatiza. Apréciala. Afírmala. ¿Estás dispuesto a hacer eso?’

logo-articulos1a