Clave del 3 de junio de 2016

¿Por qué la vida en pareja importa?  Como miembros de la sociedad, contamos unos con otros para que la vida sea posible.  Nos sentimos más seguros cuando podemos contar con los demás.  La composición de las parejas culturalmente ha tenido cambios y siempre los ha tenido.  Sin embargo, el espectro de beneficios de la vida en pareja es bien amplio, destacándose los siguientes:  1) a las personas que están en pareja les va mejor financieramente, 2) la vida en pareja está asociada a una mejor salud, sexo y seguridad tanto para hombres como para mujeres.  Piensa hoy:  ¿de qué forma estás cuidando tu relación?

logo-articulos

El carácter sanador del perdón en las relaciones

En toda relación de pareja se comenten errores y el perdón se hace necesario para que el vínculo se mantenga fuerte. El perdón puede ocurrir aunque quien cometió la falta no lo haya pedido. Perdonar representa un proceso de liberación personal. Sin embargo, ninguna persona está obligada a hacerlo. En un escenario ideal, quién erró pedirá perdón como señal de arrepentimiento genuino y de reconocimiento de responsabilidad personal. Por lo tanto, en las relaciones de pareja, tanto el pedir perdón como el perdonar se convierten en procesos que se alternan entre cónyuges. Los involucrados en una relación cometen errores continuamente. Así las cosas, debe evitarse asumir el papel de víctima y reconocer cuando se ha fallado.

En toda relación de pareja se comenten errores y el perdón se hace necesario para que el vínculo se mantenga fuerte.

El pedir perdón tampoco debe convertirse en un ritual que se lleve a cabo únicamente con el único fin de lograr una reconciliación o terminar una discusión. Hay quienes incurren reiteradamente en las mismas faltas a sabiendas del daño que causarán y con el convencimiento de que al disculparse resolverán la situación. Es necesario tener presente que esta práctica va a ir creando fisuras que causarán que tu pareja se canse de perdonarte continuamente por las mismas situaciones y la relación terminará por disolverse.

Pedir perdón no es señal de debilidad. Todo lo contrario. Es señal de fortaleza, es señal de integridad, es señal de rectitud. Además, envía un mensaje fuerte del compromiso que se tiene con la relación.

El proceso de pedir perdón debe ser oportuno. O sea, mientras más lejano del acto se produce menos efectividad tendrá. Asimismo, debe escogerse el lugar, lenguaje y momento adecuados. Un lenguaje sarcástico, agresivo o de burla provocará un efecto contrario al que se busca. Trata de no abordar el tema si tu pareja está ocupada, conduciendo o en medio de una actividad. Pretender tener sexo mientras le pides perdón por una ofensa podría ser contraproducente, sobre todo con las mujeres. Es recomendable escoger un lugar privado y libre de distracciones que se preste para la conversación. No se puede olvidar que el haber recibido el perdón solicitado no conlleva necesariamente la desaparición del enojo en la persona afectada. Perdón no implica necesariamente olvido. Perdonar es muchas veces pasar la página y dejar el evento atrás.  Es esencial proveer el espacio para que, en sus propios términos, la persona herida procese el evento y sane.

Perdón no implica necesariamente olvido.

Entonces, cuida que al momento de pedir perdón tu lenguaje verbal y no verbal reflejen sinceridad, arrepentimiento sincero y deseo de hacer algo para reparar el daño causado. Asegúrate de emplear la palabra “perdón” durante tu argumento. Asegúrate de expresar tu reconocimiento de qué fue lo que hiciste mal. Asegúrate de realizar una oferta de reparación, o sea, sugerir o pedir alternativas sobre lo que puedes hacer o no hacer para reparar el daño causado.

Saber pedir perdón y saber perdonar son dos de los pilares más importantes en una relación.

logo-articulos