Di «Gracias» y «nosotras/os»

Dos palabras que pueden ser de gran ayuda en tu relación: «Gracias» y «nosotros/as». En 2007, investigadores de la Universidad Estatal de Arizona preguntaron a parejas casadas si apreciaban las tareas realizadas por la otra persona. Si bien la mayoría dijo que sentía gratitud, muchos no habían transmitido estos sentimientos a sus parejas, asumiendo que «él o ella simplemente lo sabe». Los resultados también mostraron que las personas que se sentían apreciadas por sus parejas tenían menos resentimiento por cualquier desequilibrio en el trabajo y más satisfacción con sus relaciones que otros participantes del estudio.

Otra palabra sencilla que puede aumentar la satifacción de la pareja: «nosotros». Un estudio publicado en la edición de septiembre de 2009 de la revista Psychology and Aging encontró que los cónyuges que usaban palabras centradas en la pareja como «nosotros», «nuestro» y «nos» cuando hablaban de un conflicto también mostraban más afecto, menos comportamientos negativos como como ira y niveles más bajos de estrés fisiológico durante una discusión. El uso de palabras que expresaran individualidad, como «yo», «tú» y «yo», durante la discusión se asoció con la insatisfacción conyugal.

Demostrar compasión hacia la pareja tiene sus recompensas

¿Qué importancia tienen actos como cambiar planes personales para complacer a la pareja, o hacer algo que le haga sentir valiosa, o expresarle ternura y gratitud?  Pues Harry Reis, profesor de piscología de University of Rochester, diseñó y dirigió una investigación que fue publicada en la revista Emotion, y que pretendía probar la hipótesis del Dalai Lama referente a que la expresión de compasión hacia otras personas amplifica o mejora el estado afectivo personal. Para realizar este estudio los investigadores utilizaron una muestra de 175 parejas norteamericanas recién casadas.  Antes del estudio, los investigadores predijeron que el donador (persona que realiza una acción compasiva) experimentaría un impacto positivo en su bienestar emocional cuando su pareja le reconociera la acción realizada. También anticiparon que el recipiente (persona que recibe una acción compasiva) se beneficiaría emocionalmente cuando el acto haya sido mutuamente reconocido como uno compasivo, en oposición a cuando uno de los cónyuges percibe la acción como una que no fue deliberadamente hecha por compasión. Sin embargo, aunque estas predicciones se confirmaron, también los investigadores encontraron algo más: los donadores también se benefician de realizar actos compasivos incluso aunque el recipiente no los note explícitamente, y en estos casos, los beneficios para los donadores eran un 45 porciento mayor que para el recipiente.