Cuando te reúnas con tu pareja luego del día de trabajo, salúdala con un beso y un fuerte abrazo, otra vez: un beso y un fuerte abrazo. Cenen siempre juntos y compartan los eventos del día. Durante esta conversación cada uno tendrá la oportunidad de hablar y de ser escuchado. Eviten los conflictos y hagan que éste sea un espacio de paz, afecto, apoyo y atención.