Un estudio publicado en la revista Personality and Social Psychology Bulletin, realizado por Peter K. Jonason, concluyó que las personas involucradas en una relación le dan más importancia a las características negativas de la pareja en comparación con las positivas. De acuerdo con el estudio, entre las características negativas que podrían conducir a un rompimiento se destacan: mal sexo, enfermedades de transmisión sexual, malos olores, pobre higiene, problemas de temperamento o conducta abusiva, infidelidad y no ser confiable.