Rodéate de los soñadores y los hacedores, de los que creen y los pensadores, pero sobre todo, rodéate de quienes ven la grandeza dentro de ti, incluso cuando no la ves tú mismo.

Rodéate de los soñadores y los hacedores, de los que creen y los pensadores, pero sobre todo, rodéate de quienes ven la grandeza dentro de ti, incluso cuando no la ves tú mismo.
No existe ser humano perfecto. Todas las personas tienen su historia y todas las personas tienen áreas débiles en su personalidad. El no reconocer esto es robarle humanidad a la pareja.