En el momento en que colocas a alguien en un pedestal, te mirará desde arriba. El truco es respetar la igualdad mutua.

En el momento en que colocas a alguien en un pedestal, te mirará desde arriba. El truco es respetar la igualdad mutua.

Los hombres no somos perros. Meramente pensamos que lo somos y, en ocasiones, actuamos como si lo fuéramos. Pero, al creer en nuestra naturaleza más noble, las mujeres tienen el tremendo poder de inspirarnos para estar a la altura de eso.
