Las condiciones de salud mental y las relaciones de pareja

Fui diagnosticado con una condición de salud mental hace aproximadamente cinco años. Debido a esto, no he estado en ninguna relación desde entonces toda vez que admito que sería una pareja horrible. Entiendo que puede ser un reto compartir conmigo. Aunque he tratado de poner de mi parte, siento que es algo que está fuera de mi control. A veces, pienso que debería olvidarme de mi condición y tratar de conseguir una pareja. Lo que realmente me asusta es la forma en que de repente me atrapa y me impulsa a hacer cosas que, cuando estoy estable, nunca haría. Me siento desconcertado y desanimado debido a que no sé si mi futuro es estar solo y no poder vivir la vida que siempre he querido para mí.

Respuesta del Psicólogo

Una condición de salud mental no tratada puede impactar seriamente las relaciones de pareja. Los síntomas asociados a una condición de salud mental pueden variar e ir desde leves hasta severos. Muchos de ellos pueden provocar conductas impulsivas o riesgosas, cambios de ánimo significativos, sentimientos crónicos de vacío, coraje frecuente, agresión, desánimo, desesperanza, entre muchos otros.

Se conoce que el tener una condición de salud mental puede tener un impacto negativo en la salud mental del cónyuge. A veces, uno de los cónyuges en una relación puede estar batallando con síntomas que se le han desarrollado como resultado de una condición de salud mental en el otro. De hecho, investigaciones en el área han encontrado una correlación positiva entre uno de los cónyuges teniendo una condición de salud mental y el otro cónyuge sufriendo también de este tipo condición.

Una condición de salud mental pone estrés en la relación. Cuando una relación está bajo estrés, los cónyuges comienzan a distanciarse física y emocionalmente. Tienden a evitarse y cuando finalmente coinciden, resulta en un encuentro con conversaciones sin substancia o elevadas de tono.

En mi carrera como psicólogo, he trabajado con parejas donde uno o ambos han tenido alguna o varias condiciones de salud mental. Típicamente, un proceso terapéutico de parejas tiene más probabilidades de ser efectivo cuando los cónyuges tienen sus condiciones de salud mental debidamente tratadas y controladas. He presenciado de primera mano los efectos curativos que tienen las relaciones de pareja saludables en los individuos que están batallando con condiciones de salud mental. Las relaciones de pareja saludables sirven como defensa que ayuda a los individuos a combatir sus condiciones de salud mental y/o física.

Es importante señalar que hay tratamiento disponible, incluyendo el aprender destrezas que ayuden a tener una relación de pareja saludable. La terapia de parejas, combinada con la terapia individual y el tratamiento psiquiátrico, podría ser de utilidad. Muchas de las personas que lidian con condiciones de salud mental pueden experimentar decepciones y dolor emocional en sus relaciones.  Debido a esto podrían pensar que el amor y las relaciones de compromiso están fuera de su alcance. Es necesario tratar de no adoptar este tipo de pensamiento. Una relación de pareja saludable está al alcance de todo el mundo, incluyendo aquellos que sufren de una condición de salud mental. Es sólo una cuestión de compromiso con el tratamiento y de cónyuges que están dispuestos a ser pacientes y compresivos.

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La confianza como reto

Soy un hombre de 35 años de edad. La situación es que no puedo confiar en nadie. A través de mi vida he tenido muchas experiencias y no considero que se pueda confiar en las personas. He visto continuamente que la gente tiende a utilizar a los demás. Una vez han obtenido lo que desean, las echan a un lado. A pesar de esto, como todo el mundo, me gustaría poder sentirme cercano a alguien, poder tener una relación adecuada, pero como se me hace difícil confiar en los demás, no veo cómo esto pueda ser posible. Esta situación me provoca una gran ansiedad y desesperanza en el futuro. Me pregunto cómo puedo confiar en los demás sin tener que pasar por una decepción nuevamente y el sufrimiento que esto conlleva.

Respuesta del Psicólogo

El no poder confiar podría conllevar el distanciamiento emocional y, en ocasiones, físico. La confianza entonces se convierte en, tal vez, el aspecto más importante en las relaciones de pareja. La inhabilidad para confiar resulta ser dañino para la salud de una relación. Este elemento en las relaciones es uno de los más frágiles debido a que es de difícil construcción, pero de fácil rompimiento. Es por eso que la tendencia a desconfiar es algo relativamente común entre las personas. Las razones más frecuentemente citadas son experiencias negativas previas que las han conducido a la decepción por entender que fueron traicionadas en la confianza que alguna vez depositaron en alguien. Pero no siempre la inhabilidad para confiar se relaciona con este tipo de experiencia negativa, en ocasiones, su origen se remonta al tipo de vínculo que tuvimos con nuestros padres, madres o cuidadores. El que las personas a nuestro alrededor fallaran en cuidarnos adecuadamente mientras éramos infantes, o de fomentar una relación de apego saludable, podría impactar nuestra confianza en los demás más tarde en la vida. Por supuesto, existen otros factores, e incluso, podría darse una combinación de estos.

Sin embargo, la buena noticia es que a pesar de todo esto, es posible reaprender a confiar. El habernos sentido traicionados en el pasado puede llevarnos a experimentar sentimientos opuestos, como el querer confiar, pero al mismo tiempo alejarnos para sentirnos seguros y no vulnerables. Lo importante es entender que la necesidad de confiar y de sentirnos cercanos a los demás está en todos nosotros y nosotras. Es importante reconocer lo anterior y adueñarnos de ese sentimiento. Es importante no conformarnos con sacrificar nuestra felicidad y vivir en soledad en función de una aparente seguridad de que no vamos a ser heridos. Es importante también tener la disposición de tomar riesgos y salir del pasado. Ciertamente, podríamos ser dañados nuevamente, pero el daño podría ser más a consecuencia de haber creado unos apegos pocos saludables y una relación de codependencia, más que por la traición en sí. Debemos siempre recordar que todo aquello que no nos mate, nos hará más fuerte.

Así que permítete el privilegio de crecer, toma tu tiempo antes de confiar plenamente en alguien, y ten la disposición de hablar acerca de tus reservas, miedos, y expectativas. Para muchas de las parejas con quienes trabajo, y donde uno de los cónyuges ha sido víctima de infidelidad, esa persona comúnmente necesita espacio para sanar y sentirse segura nuevamente con su pareja antes de tan siquiera comenzar un diálogo sobre la reconstrucción de la confianza.

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