Sexo

En terapia los cónyuges encuentran un espacio seguro para hablar asunto tan sensitivos como los que se relacionan con el sexo.  Las parejas con frecuencia se atascan en un ciclo sexual negativo.  Es importante señalar que cuando las parejas disfrutan de buen sexo, usualmente querrán más éste, lo que les brinda la oportunidad de fortalecer el área de la intimidad.  En terapia exploramos las barreras que podrían existir que les impidan el disfrute de la sexualidad.

 

Las mujeres y el orgasmo

Existen tantas formas de complacer a una mujer como mujeres existen. Las mujeres poseen diversas preferencias al momento de alcanzar un orgasmo. Debby Herbenick realizó una investigación publicada en el Journal of Sex & Marital Therapy, que examinó las experiencias de las mujeres relacionadas con el orgasmo, el placer sexual y el toque genital. Con una muestra de 1,055 mujeres estadounidenses de 18 a 94 años de edad, Herbenick encontró que en las mujeres, tanto el orgasmo como la calidad de éste es contingente a varios factores. En este estudio, el 36.6% de las participantes indicó que necesitaban estimulación clitórea en orden de poder alcanzar un orgasmo, mientras que el 18.4% indicó que la penetración vaginal era suficiente. Un 36% indicó que la estimulación clitórea no era necesaria para que pudieran alcanzar un orgasmo, pero que mejoraba la calidad de éste grandemente. El 9% indicó que no experimentaban orgasmos durante el sexo.

En cuanto al tipo de estimulación manual u oral que preferían, el 63.7% señaló su preferencia por un movimiento tipo ‘arriba-abajo’ en la vulva y un 51.6% disfrutaba de un uno que sea ‘circular’. Un 30.6% indicó que prefería un movimiento de ‘lado a lado’. Las opciones menos populares fueron recibir golpes en el clítoris y que se ejerza presión en un punto específico. Estas mujeres tampoco favorecieron el halar o el apretar el área.

Lo cierto es que 2/3 partes de las mujeres prefirió la estimulación directa del clítoris y sólo el 5% indicó que preferían que su pareja obviara esta parte por completo. La autora entonces concluye que las mujeres son altamente diversas cuando se trata de lo que les excita y el tipo de toque que encuentran placentero, lo que pone en evidencia la necesidad de que las parejas exploren juntas las posibilidades y de ser abiertas al expresarse mutuamente las técnicas sexuales que prefieren.